Visita el cuadro de Sorolla ‘Después del baño’ y sus detalles siguiendo la voz y los recuerdos del escritor Manuel Vicent.
El escritor Manuel Vicent elige uno de sus cuadros favoritos de la exposición que comisaría por el centenario del pintor y recuerda cómo descubrió que el barco más seguro para surcar el Mediterráneo era una bola de papel. El sol Hay otros niños en el mar bañándose, un momento que a Vicent le devuelve a cuando era un poco más mayor, cuando descubrió de verdad el mar: “Tuve una sensación de una salvaje libertad que te obligaba a gritar al aire”.
La libertad en esta silla están depositadas las bolsas con su ropa, tal vez cestas con las viandas. La comida, Manuel Vicent describe la mirada de una de las niñas “entre pícara y divertida”. Y encuentra “un levísimo erotismo” en la manera en que la otra se baja el tirante que, asegura, a la vez le parece un paso de danza.
La danza cuando Vicent era pequeño jugaba en la orilla como los niños del cuadro con un balandro, una bola hecha de papel que suele pintar Sorolla. “La fabricábamos con una hoja de cuaderno escolar y nunca naufragaba. Es un balandro de los sueños”.
El balandro El autor destaca una contradicción en la obra del pintor: “Dentro de la luz blanca siempre hay una luz negra o frustrante. Pintar la luz es su manera de atrapar las cosas porque la luz es la forma”.