Notice: Function _load_textdomain_just_in_time was called incorrectly. Translation loading for the jetpack domain was triggered too early. This is usually an indicator for some code in the plugin or theme running too early. Translations should be loaded at the init action or later. Please see Debugging in WordPress for more information. (This message was added in version 6.7.0.) in /home/laverda4/public_html/wp-includes/functions.php on line 6114

Notice: Function _load_textdomain_just_in_time was called incorrectly. Translation loading for the wordpress-seo domain was triggered too early. This is usually an indicator for some code in the plugin or theme running too early. Translations should be loaded at the init action or later. Please see Debugging in WordPress for more information. (This message was added in version 6.7.0.) in /home/laverda4/public_html/wp-includes/functions.php on line 6114

Notice: Function _load_textdomain_just_in_time was called incorrectly. Translation loading for the wp-smushit domain was triggered too early. This is usually an indicator for some code in the plugin or theme running too early. Translations should be loaded at the init action or later. Please see Debugging in WordPress for more information. (This message was added in version 6.7.0.) in /home/laverda4/public_html/wp-includes/functions.php on line 6114
LUIS MIGUEL REGRESA A LA ARENA CIUDAD DE MÉXICO; ASÍ FUE SU CONCIERTO - SOCIALITE MEXICAINE

LUIS MIGUEL REGRESA A LA ARENA CIUDAD DE MÉXICO; ASÍ FUE SU CONCIERTO

Voz, música y pasión ofrece el ídolo al comenzar su temporada en la Arena Ciudad de México

La silueta de la voz que más conmueve al público mexicano se delineó 15 minutos después de las 21:00 horas; Luis Miguel descendió por unas escaleras hacia el centro del escenario al ritmo de «Será que no me amas», mientras los aplausos del público que llenaba la Arena Ciudad de México resonaban con entusiasmo.

foto:roberto hernanez

Más de 22 mil asistentes se congregaron para disfrutar de una de las giras más exitosas del icónico artista, quien recibió a sus fans con su característica sonrisa y una fortaleza admirable. Casi como un director de orquesta, Luis Miguel utilizó las primeras canciones de su concierto—»Amor amor amor», «Suave» y «Culpable o no»—para dirigir a los más de 14 músicos y cantantes que formaban su orquesta, a la vez que coordinaba al equipo técnico para ajustar su respaldo tecnológico. “Arriba monitor, arriba teclado, abajo micrófono…” cada detalle fue meticulosamente acomodado a sus necesidades, creando un ambiente perfecto para una noche inolvidable.

En el público había de todo: hombres y jóvenes, niños disfrazados del intérprete, lentes oscuros y traje, grupos de fans uniformados en un mismo color, marcados con tatuajes o con algún distintivo evidente, y una ligera mayoría de mujeres, que respondían con gritos a cada enganche de cadera y puñetazo al aire del que es una de las voces más representativas de la historia de la música mexicana.

“¡¿Cómo dice?!”, invitaba Luis Miguel al público en canciones como Te necesito, Hasta que me olvides y Dame. Por momentos, incluso parecía que había dos voces en la Arena Ciudad de México: la de Luis Miguel, dinámica, creativa e incontrolable, y la del público, puntual y emotiva, siempre fiel a las melodías que están impregnadas en la idiosincrasia del pueblo mexicano.

El medley de Armando Manzanero desató suspiros entre el público. Una luz blanca distinguía el cuerpo del cantante entre un escenario estrellado mientras interpretaba Por debajo de la mesa y No sé tú.

Lo mismo ocurrió con el romántico arreglo de canciones inmortales como «Solamente una vez», «Somos novios», «Como yo te amé», «Todo y nada» y «Nosotros», que interpretó mientras los suspiros del público se multiplicaban, al igual que los coros llenos de emoción. Así comenzó el ídolo su presentación en la Arena Ciudad de México, arrancando con «Come Fly With Me», seguido de «Smile», «No me puedes dejar así» y «Ahora te puedes marchar», en las que siempre encontró el eco entusiasta de sus fans.

Con «La incondicional», la Arena se vino abajo. El público, desbordado de energía, se movía en sus asientos, mientras algunos invadían los pasillos centrales en busca de un mejor ángulo para grabar un video. La enigmática línea de guitarra de «Ahora te puedes marchar» marcó el inicio del cierre de su concierto, creando un ambiente electrizante que mantenía a todos al borde de la emoción.

foto:roberto hernanez

Al cierre de esta edición, Luis Miguel seguía demostrando a su audiencia que su ausencia de los escenarios se había sentido, pero que, después de tantos años de carrera, continúa siendo una garantía artística que deleita todos los sentidos. Su presencia imponente y su interpretación apasionada recordaron a todos por qué es considerado uno de los grandes de la música latina, dejando a los asistentes ansiosos por más, mientras el eco de sus melodías resonaba en la memoria colectiva de aquellos que tuvieron la suerte de estar allí.

Comparte las ultimas noticias:

Noticias relacionadas