En un reciente informe se revela que más de 230 millones de mujeres y niñas alrededor del mundo han sufrido mutilación genital.

Además, se estima que 27 millones más están en riesgo de ser sometidas a esta práctica en los próximos años. La mutilación genital femenina (MGF) es una violación de los derechos humanos y una forma extrema de discriminación y violencia de género.
A pesar de los esfuerzos internacionales para erradicar esta práctica, sigue siendo prevalente en diversas regiones, especialmente en África, Oriente Medio y algunas partes de Asia. Las razones detrás de la MGF son diversas, incluyendo creencias culturales, religiosas y sociales profundamente arraigadas en ciertas comunidades.
Organizaciones internacionales y activistas de derechos humanos continúan trabajando arduamente para concienciar sobre los peligros y el impacto negativo de la MGF en la salud física y mental de las mujeres y niñas. Además, se están implementando programas educativos y de sensibilización en las comunidades afectadas para erradicar esta práctica y proteger a las futuras generaciones.