En un gesto significativo, las banderas de Estados Unidos ondearán a media asta durante la toma de posesión de Donald Trump como presidente.

Esta medida fue ordenada por el actual presidente, Joe Biden, para honrar al expresidente Jimmy Carter, quien falleció recientemente a los 100 años de edad.
El código de banderas de Estados Unidos establece que, en caso de la muerte de un presidente o expresidente, las banderas deben izarse a media asta durante un periodo de 30 días. Este protocolo se aplica a edificios del gobierno federal, embajadas, instalaciones militares y navíos. Además, se extiende a banderas estatales, ya que ninguna puede estar más alta que la bandera nacional.
Trump ha expresado su frustración por esta decisión, ya que las banderas ondearán a media asta durante su investidura y la primera semana de su mandato. Sin embargo, no podrá cambiar esta medida hasta después de asumir el cargo.
Este gesto refleja la importancia de honrar a los líderes pasados y su legado, incluso en momentos de transición política. La muerte de Jimmy Carter ha sido un evento significativo para la nación, y esta medida busca rendirle el debido respeto.