El Banco de México (Banxico) ha anunciado una reducción de 25 puntos base en la tasa de interés interbancaria, situándola en diez por ciento.
Esta decisión, tomada por unanimidad, es el cuarto recorte consecutivo y busca responder a la disminución gradual de la inflación en el país.
La inflación general bajó del 4.76 por ciento en octubre al 4.55 por ciento en noviembre, mientras que la inflación subyacente disminuyó del 3.80 por ciento al 3.58 por ciento en el mismo periodo. A pesar de estos avances, Banxico señaló que ciertos desafíos persisten, como el aumento moderado en los precios de servicios.
La medida también está alineada con la reciente reducción de la Reserva Federal de Estados Unidos, que ajustó su tasa de interés a un rango de 4.25 a 4.50 por ciento. Banxico espera que tanto la inflación general como la subyacente sigan disminuyendo a largo plazo, aunque advirtió que factores como la posible imposición de aranceles por parte de Estados Unidos podrían afectar estas proyecciones.
Esta reducción en la tasa de interés refleja la confianza de Banxico en la tendencia a la baja de la inflación y busca apoyar el crecimiento económico al reducir los costos de financiamiento para empresas y consumidores. Sin embargo, la institución también subrayó la importancia de mantener la prudencia y estar preparados para ajustar la política monetaria en respuesta a cambios inesperados en el entorno económico.
Los analistas del mercado han recibido esta decisión con opiniones mixtas, algunos destacando los beneficios potenciales para el crédito y la inversión, mientras que otros expresan preocupación por los posibles efectos sobre la estabilidad financiera si la inflación no continúa su tendencia a la baja como se espera.
