El 2 de mayo, el portavoz del Gobierno iraní, Ali Bahadori Jahromi, declaró que las conversaciones se centrarán en el comercio y la cooperación económica. A finales de abril, el periódico sirio Al Watan adelantó que Raisi llegará el 3 de mayo a Damasco para mantener negociaciones con su homólogo sirio, Bashar Asad, sobre el fortalecimiento de la cooperación estratégica bilateral, particularmente, en el ámbito económico. Según el medio, la visita durará dos días.
La visita del presidente de Irán a Siria se enmarca en el retorno de Siria a la escena política internacional tras 10 años de aislamiento. Varios países regionales han mostrado su interés en restablecer relaciones con el Gobierno del presidente sirio, Bashar Asad.
El 2 de mayo, los ministros de Exteriores de Jordania, Egipto, Arabia Saudita, Irak y Siria acordaron trabajar en reanudar la labor del Comité Constitucional para Siria. Los cancilleres aprobaron la agenda de futuras conversaciones que incluirá asuntos políticos y humanitarios y la situación de seguridad. Las partes convinieron en que el Gobierno sirio, en coordinación con la ONU, comenzará a preparar las condiciones para el regreso de los refugiados. Sobre todo, se construirán nuevas viviendas, escuelas, hospitales, y se establecerán más puestos de trabajo.
El 12 de abril, el ministro Exteriores sirio, Faisal Mekdad, llegó a Arabia Saudita en la primera visita de un funcionario sirio al reino desde el inicio de la crisis, con el fin de debatir los esfuerzos por lograr una solución política a la crisis siria que facilite el regreso de los refugiados sirios a su patria y garantice la entrega de asistencia humanitaria a las zonas afectadas en Siria.
Seis días después, el titular de Exteriores de Arabia Saudita, Faisal bin Farhan, llegó a Siria en una visita de respuesta para sostener conversaciones con Bashar Asad. El 23 de marzo, se anunció que Siria y Arabia Saudita acordaron reanudar la labor de sus embajadas tras una década de ruptura de sus relaciones.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto, en el que las fuerzas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas.
La solución del conflicto se busca en dos plataformas, la de Ginebra, bajo los auspicios de la Organización de las Naciones Unidas, y la de Astaná, copatrocinada por Rusia, Turquía e Irán. Actualmente, los esfuerzos se centran en la búsqueda de una solución política a la crisis siria y el retorno de los refugiados.
El estado actual de las cosas supone que en el futuro haya solo una solución al conflicto, el diálogo. El gran problema con el proceso político yace en el fracaso de las anteriores consultas. Las partes se sentaron en la mesa de negociaciones en reiteradas ocasiones, pero no han hallado un denominador común.
