La famosa actriz crea el proyecto Atelier Jolie donde, de la mano de prestigiosos sastres, realiza procesos de reciclaje de prendas para darles un segundo uso
Una de las grandes pasiones de Angelina Jolie, siempre ha sido el diseño de moda. Sin embargo, la famosa estrella de Hollywood se ha distinguido por un estilo sobrio y elegante sin hacer ningún alarde de marcas de lujo u ostentosidad que llamen la atención.
Lo anterior, aunado a su constante actividad altruista a favor de los más vulnerables, y el cuidado del medio ambiente, lo proyecta en su más reciente proyecto que lleva por nombre, Atelier Jolie.
Se trata de una boutique ubicada en un edificio de la calle 57 Great Jones St., en Nueva York. El edificio que aloja este espacio, originalmente fue propiedad del artista Andy Warhol y donde vivió el artista plástico, Jean Michel Basquia, mejor conocido como «Samo«.
Este proyecto es creado por sastres de La Gran Manzana, a quienes la actriz convocó para formar un colectivo dedicado a diseñar moda, a partir del concepto upcylcling (reciclaje) y bajo la premisa de ser un producto diferente a lo que ya existe en el mercado.
La materia prima con la que los creativos de este atelier dan forma a cada pieza, se obtiene a partir de la reutilización de prendas, telas deadstock (desperdicio de fabricación), materiales y tejidos sostenibles.
Esta nueva inversión de Jolie en el mundo de los negocios relacionados con la industria de la moda, va de la mano con su más reciente colaboración con la marca francesa Chloé, creada por la empresaria Gabriela Hearts, que fue de las primeras firmas de lujo en obtener la certificación internacional B Corp, la cualreconoce la legalidad en la elaboración de productos no contaminantes y amigables con el medio ambiente.
A través de esta alianza, la actriz ha podido dar “segunda vida” a algunas prendas de su guardarropa que se encontraban olvidadas durante varios años, como vestidos que pudo convertir en tops o en suéteres, capas y otras prendas que junto con los expertos, rediseña empleando telas como la seda y la lana orgánicas, es decir que en su proceso de elaboración, no se utilizó ningún tipo de químico o sustancia contaminante.
El 80 por ciento de los productos empleados en el Atelier Jolie, son de bajo impacto ambiental y se mantiene en constante difusión de la importancia del cuidado del planeta a través de acciones sociales apoyadas de fundaciones relacionadas con este tema.
Asimismo, la famosa actriz impulsa al talento de la gastronomía local, ofreciendo una carta de postres, café y snacks creada por destacados chefs y reposteros neoyorquinos.
