«Kraven el Cazador» ha sido un fracaso en taquilla, recaudando poco en su primer fin de semana.
La película, protagonizada por Aaron Taylor-Johnson, no logró atraer a una audiencia significativa, quedando en tercer lugar detrás de «Moana 2» y «Wicked: Part One». Con un alto presupuesto, la película ha sido calificada como uno de los peores debuts para una película del universo de Spider-Man.
Las críticas han sido duras, con una baja calificación en Rotten Tomatoes. Los factores que contribuyeron a su fracaso incluyen la sobresaturación de películas de superhéroes, la falta de reconocimiento del personaje y una campaña de marketing deficiente. Además, la película no siguió fielmente la versión del cómic del villano, lo que decepcionó a los fanáticos.
Además de la baja asistencia a las salas de cine, los comentarios negativos en redes sociales y sitios de reseñas han afectado aún más la reputación de la película. Los espectadores han señalado que la trama es inconsistente y los efectos especiales no están a la altura de otras producciones del género.
Este revés es un golpe significativo para Sony, que ha estado tratando de expandir su universo cinematográfico basado en personajes de Spider-Man. El fracaso de «Kraven el Cazador» pone en duda futuros proyectos y plantea preguntas sobre la dirección creativa y estratégica del estudio.