El gobierno de la Cuarta Transformación ha decidido ampliar la lista de delitos que ameritan prisión preventiva oficiosa, pero ha excluido el narcomenudeo y el fraude fiscal de estas nuevas disposiciones.

La reforma, presentada recientemente, busca fortalecer el sistema de justicia penal y garantizar una mayor seguridad pública.
Esta ampliación incluye una serie de delitos graves, como el abuso sexual infantil, el feminicidio, y otros crímenes de alto impacto que afectan directamente a la sociedad. Sin embargo, la exclusión del narcomenudeo y el fraude fiscal ha generado debate entre especialistas y la ciudadanía, ya que estos delitos también representan un riesgo significativo para el bienestar social y económico del país.
El objetivo del gobierno con esta reforma es mejorar la eficacia del sistema penal y asegurarse de que los individuos acusados de delitos graves enfrenten un proceso judicial sin la posibilidad de evadir la justicia. La decisión de excluir ciertos delitos se basa en la necesidad de enfocar los recursos y la atención en crímenes que afectan de manera más directa y violenta a la comunidad.
La medida ha sido recibida con opiniones divididas. Mientras algunos expertos consideran que es un paso hacia un sistema más justo y enfocado, otros creen que dejar fuera el narcomenudeo y el fraude fiscal podría dejar lagunas en la aplicación de la justicia.