Miles de personas en desacuerdo con las decisiones del gobierno exigen elecciones anticipadas y el retorno de rehenes
En Jerusalén, miles de manifestantes se congregaron nuevamente para expresar su descontento con el gobierno del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. Las protestas, que se llevaron a cabo frente al Tribunal Supremo y luego se dirigieron hacia la residencia de Netanyahu, tienen como objetivo principal exigir un acuerdo que permita el retorno de los rehenes secuestrados por el grupo islamista palestino Hamás hace más de un año, así como la convocatoria de elecciones anticipadas.
La reciente destitución del ministro de Defensa, Yoav Gallant, por parte de Netanyahu, ha intensificado las manifestaciones. Gallant fue cesado debido a discrepancias en la gestión de la guerra en Gaza, lo que ha generado una ola de indignación entre los ciudadanos. Los manifestantes portaban carteles con mensajes como «Quien destruye no repara. ¡Elecciones ya!» y «La destrucción ya está aquí. Tenemos que convocar elecciones».
Einav Zangauker, madre de uno de los cautivos en Gaza, ha sido una de las voces más destacadas en las protestas. Durante su intervención, hizo un llamado a la unidad y a la resistencia pacífica, instando a los ciudadanos a unirse a la causa y a plantar tiendas de campaña junto a la residencia de Netanyahu hasta que se logre un acuerdo.
Las manifestaciones también se extendieron a Tel Aviv, donde una multitud se reunió para mostrar su apoyo a los rehenes y exigir cambios en el gobierno. La situación en Israel sigue siendo tensa, con un creciente clamor popular por elecciones anticipadas y una resolución pacífica del conflicto con Hamás.