El Senado discute una reforma que otorga más poder a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana para combatir la delincuencia y garantizar la transparencia en el uso de recursos públicos
Foto: Verónica Trujillo News
Este miércoles, el Senado de la República llevará a cabo la discusión de una reforma constitucional al artículo 21, impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum, que otorga nuevas facultades a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). La reforma tiene como objetivo fortalecer la lucha contra la delincuencia organizada y asegurar una gestión más transparente de los recursos destinados a la seguridad pública. Desde su presentación en las Comisiones del Senado, la propuesta ha recibido el respaldo de todos los grupos parlamentarios, que la consideran un cambio importante en la estrategia de seguridad del país.
La reforma busca devolver un enfoque civil a la seguridad nacional, que estuvo bajo coordinación militar durante el sexenio anterior. De ser aprobada, permitiría que la SSPC trabaje directamente en investigaciones criminales con la Fiscalía General de la República, mejorando la coordinación en la lucha contra la delincuencia organizada. Además, se le otorgarían facultades para auditar los recursos federales destinados a la seguridad, promoviendo la transparencia en su uso.
Otro de los puntos clave de la reforma es que la SSPC, en conjunto con la Presidencia de la República, coordine y dirija la Estrategia Nacional de Seguridad, lo que implica una mayor colaboración entre los diferentes niveles de gobierno. Esto podría tener un impacto directo en la efectividad de las políticas de seguridad en todo el país.
La reforma también contempla que la SSPC mantenga el control civil de las políticas de seguridad, apoyándose en inteligencia y tecnología avanzada para prevenir delitos y mejorar el análisis de datos. Como señaló el senador Colosio Riojas, “es hora de que la inteligencia y tecnología en seguridad dejen de ser una opción y se conviertan en herramientas diarias para proteger a la ciudadanía”. Aunque la reforma ha generado un amplio respaldo en el Senado, algunos legisladores advierten que el verdadero desafío radica en su implementación efectiva, dado el contexto de seguridad tan complejo que enfrenta México.